Miércoles 5 de Julio de 2011
AL ROJO VIVO
JESUS CHAVEZ JIMENEZ
Una vez me confió mi santa madrecita, que su canción preferida era Los Caminos de la vida. Y después de esa confesión cada vez que la oigo se me enchina la piel, porque me acuerdo de esa gran mujer que me regalo lo mejor; la vida. Y de esta canción y de los caminos me acorde ayer cuando caminaba por esas calles aquerenciadas de La Paz. Y en esas llamémosle reflexiones me vino a la mente los caminos del gobernador Marcos Covarrubias, sus nuevos caminos. Y dos de ellos creo que son los más importantes y de cuyo andar nos compete a todos los ciudadanos. El primero es el del ajuste de cuentas que ha iniciado, desde el momento mismo en que se hicieron públicos los pecaditos de NAM y su pandilla. El gobernador se hecho un paquetote a la espalda el cual no puede dejar hasta que concluyan. Y eso puede llevar años. Y el otro camino que creo que es el que más nos interesa es que su gobierno haga cosas. Es una verdad de que miles de sudcalifornianos y en especial los que votamos en estos comicios, estamos pendientes y al día de lo que haga o deje de hacer este gobierno del cambio. Hay expectativas y aunque enfademos las debemos de puntualizar aquí. Una mejor impartición de justicia, una procuración optima de la misma. Una mejor atención de los servidores públicos que acompañan a Marcos, un trato mas humano. Una conducta de ellos mismos, no tan avorazada como los que se fueron, que se llevaron hasta el aire que salía de los aparatos. Un comportamiento más prudente del gobernador y sus familiares.
RECHONCHA AGENDA
Una mayor comunicación con todos los sectores para definir que se puede hacer desde el gobierno. Se anhela en síntesis un mejor mandato estos cuatro años y medio. Esto es lo que esperamos. Entonces en las manos del gobernador está la de tomar el camino que quiera. El de pelear con los que se fueron los cuatro años y medio y correr la misma vergüenza que paso con el cotismo pernicioso cuando un gobernador orate se lanzo a una vendetta contra sus mismos padrinos políticos a los que acuso, evidencio, lesiono y a los cuales al final no les pudo comprobar nada, pero si gasto lo triple en sus bodrios jurídicos que creó para saciar sus odios. Esto puede hacer Marcos y ocupar todo su gobierno. O decidir hacer lo que debe hacer un gobernador. Y es el de responder no solo a esos ajustes contra los malechores, sino el de ir desahogando la agenda, la rechoncha agenda gubernamental, que está ahí, todavía virgencita. El gobernador, solo el debe de decidir.
VIDAS PARALELAS
Cuando el Peninsular público como nota principal de que caerían peces gordos del pasado sexenio, les salió a ellos, a los aludidos una ligera sonrisita. Y obvio decir que tipo de señas y además acompañaron a esta expresión. Bueno, pues hoy comento que esta por escribirse otro capítulo de una buena pesca. Y pasara, porque los tiempos se vencen para acorralar a los pillos. Y es que si estos no son denunciados en estos días, los actuales funcionarios se convertirán en cómplices. Y creo que nadie de los actuales se anima a correr ese riesgo… Y como acotación especial, diremos que en la dependencia donde hay más cochinero, suciedad evidente y pestilente es precisamente Salubridad. Los que se fueron se llevaron hasta el alcohol y gasitas. Y eso debe de tener un castigo, creo…Ayer la alcaldesa de lujo que tenemos aquí en La Paz, Estela Ponce Beltran, recibió un duro golpe, directo al corazón. Y la causa y motivos fue el deceso de esa mujerona en toda la expresión, que fue doña Hilda Anderson. La pionera en la política contemporánea, priista por todos lados. Y lo que unió a Estelita, fue que esta dama le dio los primeros consejos en esta apasionante carrera de la política, Otra impulsora lo fue Margarita García Flores, otra esplendida mujer. Para los familiares de doña Hilda, para Estelita y para mis lectores priistas el mas sincero pésame. Animo… Y ya que estamos en este renglón de la feminidad vaya un abrazo solidario para Aracely Estrada, que convalece. Animo y no olvides que se te estima y reconoce. Un abrazo… Y con esto nos despedimos, deseándoles a todos, lo mejor. La vida misma. Y no olviden: Hagan el bien y sean felices.
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