AL ROJO VIVO
JESUS CHAVEZ JIMENEZ
Dios nos da la vida. Y la podemos perder en dos minutos.
Ayer lo viví en carne propia al sobrevivir al asalto bancario en la sucursal de
Banamex, en plaza Náutica. Fui encañonado tres veces por un asaltante
solitario. Y las tres veces Dios me blindo, para que no me matara. Nací, otra
vez. Había sido hasta las once y media, una mañana feliz. Un cumpleaños de Sarahi
colega, en el Hotel Grand Plaza. Sonrisas, carcajadas, parabienes. Y la
retirada. En la víspera Cristian Carlos, director general del diario
Independiente me dio un cheque de Banamex. Y después de desayunar, me dirigí a
plaza Náutica a cubrir un pendiente con mi tarjeta. Y al entregar el cheque, la
credencial. Y la tarjeta, para el cargo, a mis espaldas escucho una fuerte voz.
“Al piso todos. Este es un asalto.” ¿Broma? Me dije ¿Pero de quién? Y al
voltear veo a un sujeto de tez morena, vestido de livais, ya muy deslavado,
gorra roja. Y camiseta negra. En su mano, una pistola escuadra 45 tipo alemana.
Y gritando. Si llaman a la policía, los mato. Se dirigió hacia un empleado del
banco. Y le pidió que ordenara a las cajeras entregar todo el dinero.Las chicas
lo hacen y empieza a recolectar las pacas de billetes derecha a izquierda. Y al
llegar a la penúltima caja, donde yo estaba parado, me grita “Tírate al piso. Y
no me veas. Tírate. Y me encañono, en tres ocasiones. Aturdido, por el temor,
no lo hice. Y después de mirarme fijamente, molesto por desobedecerlo, salió de
prisa. Y al cruzar la puerta, volteo otra vez hacia nosotros. Y repitió su
amenaza funesta. No llamen a la policía.Menos de dos minutos. Un episodio de
temor, de emociones, de adrenalina. Y también de impotencia. Volteo hacia el
centro del local y veo un espectáculo desolador. Mujeres llorando, con ataque
de histeria. Los ejecutivos, serenos. Y de pronto, la responsable de la
sucursal, pone llave. Nadie sale, nadie entra. Pasados unos diez minutos,
llegan en tumulto los cuerpos policiacos. El director de tránsito Noé López se
asoma. Pero no entra. Llegan directivos de Banamex de otros lados. Y se hacen
cargo de la situación. El abogado de la institución, riñe con un agente de la
Ministerial. El abogado le pide que no contamine. Y el ministerial se
emberrincha. Media hora. Y encerrados. Nadie sale. Y me acerco a una ejecutiva
y le pregunto ¿Qué hacemos? ¿ Qué pasa con mi tramite? ¿Puedo salir? La
respuesta: espérese, por cuestiones de seguridad del banco, debemos de esperar.
Y ahí sentados, veo deambular policías por todos lados. De todos colores. Unos
como rambo, otros más modestos en el vestir.
TODO ES
Observo a mis compañeros de prensa, que van llegando tras la
noticia. Todo es confusión. El personal del banco recobra la calma. El banco se
cierra. No hay servicio. Y nosotros adentro.
A los cuarenta minutos. Otra vez, vuelvo a la carga. Señorita ¿Me pueden
regresar mi cheque. Mi credencial. Y mi tarjeta. Lo consulta y le aprueban que
salgamos todos. Y me regresan mis documentos. Salgo nervioso. Los pies me
cosquillean, me tiemblan las manos. Me duele la cabeza. Intento llegar a otra
sucursal. No lo hago bien. En el
trayecto un mareo constante, me tiemblan las manos. Me acerco a un
restaurant, pido un vaso de agua, Lo tomo, me tranquilizo un poco y sigo
avanzando otra vez me enrumbo otra vez a la sucursal. Entro con dificultad. Me
atiende la cajera. Y me dice; siéntese, lo veo mal. Yo hago el trámite. Salgo
arrastrando los pies. Sin darme cuenta, atrás de mí viene una mujer joven,
siguiéndome. Me para en la esquina de Belisario Domínguez y 16 de septiembre.
Me dice “Lo vi en el banco. Lo vengo siguiendo. ¿Lo puedo llevar a Urgencias
del IMSS? Me da vergüenza. Sonrió con dificultad. Le agradezco. Y le digo que
voy a unas cuadras adelante. Y como pude, llegue a un consultorio médico, por
la calle Constitución y Valentín Gómez Farías. Ahí el doctor Mario Riecke, mi
amigo como Dios, me regresa a la vida. Una pastilla en la lengua. Un reposo
prolongado. Y otra vez de pie. En la camilla, suena la alarma de Twitter. Es un
mensaje de Banamex, que me pregunta ¿Podemos ayudarle en algo? La ironía, me
hace que les responda. Si, paguen mi consulta. No lo hicieron, pero les pedí:
pongan vigilancia en las sucursales, porque las vidas no retoñan.
VIDAS PARALELAS
Éxito total en la primera visita del presidente Enrique Peña
Nieto. Las obras entregas son de relevancia para el estado. Destaco la presa
que llevara por nombre don Alberto Alvarado Aramburo. Un orgullo para Marcos
Covarrubias que le puso mucho empeño en esta. Bien… Deferencias del ejecutivo
para la alcaldesa Estela Ponce Beltrán. Y para los Senadores, en especial para
Ricardo Barroso Agramont.. Y el que también se llevó los reflectores fue el
general José Antonio Valdivia, que recibo un apapacho presidencial, como en sus
mejores tiempos. Bien… Festejo a lo grande de nuestra compañera Sarahi
Hamburgo. Se le homenajeo bien. Agradecemos a Alfonso Gavito, compañero de
prensa. Que esta prestado como director de prensa…Y con esto nos despedimos, dándoles
un fuerte abrazo. Y no olviden: Hagan el bien y sean felices.
No hay comentarios:
Publicar un comentario